10 trucos para limpiar tu casa en verano

Se acerca el verano y es momento de aprovechar este cambio de estación para aprovechar del aire fresco, el sol y la posibilidad de airear nuestras casas y encargarnos de mimarlas a fondo con una buena limpieza.

Al igual que los cambios de temporada traen ese cambio de armarios, el renovar y el mirar qué conservamos o no, pensar en nuestra casa como un todo que necesita de un repasito, nos ayudará a plantear esa limpieza a fondo que seguro hace meses estás evitando. Aquí te dejamos 10 trucos para limpiar tu casa en verano.

10 trucos para limpiar tu casa en verano


La posibilidad de disponer de algo más de tiempo, de más horas de luz nos ayuda a conectarse a esa playlist que tanto nos motiva y ponernos manos a la obra. Pero antes, te damos nuestros trucos para que esa tarea sea lo más fácil y recuperes el amor por tu casa en las mejores condiciones.

1- Antes que nada, planificación y previsión. Revisa a fondo las zonas de la casa que necesitan de una limpieza extra como baños, rincones, armarios y organiza por estancias tu plan de trabajo. Utiliza las horas de menos calor para que tu tiempo sea lo más productivo posible y logres una limpieza eficaz. Revisa tu “fondo de armario” de limpieza -para poder empezar con buen pie- porque seguro necesitas algún producto extra que normalmente no utilizas como desatascadores de tuberías, productos para una limpieza más intensiva o incluso renovar algo del textil como ropa de cama, bayetas, gamuzas y otros como estropajos o fregonas que, de no estar en condiciones óptimas, no te ayudaran más que a escampar suciedad.

 

2- Una vez ordenadas tus prioridades, te recomendamos empieces por la limpieza de elementos que normalmente no tocas como persianas, mosquiteras o cortinas para permitir que los espacios queden lo más libres de suciedad en zonas de acceso como son las ventanas. Ten en cuenta que estos elementos funcionan como barrera ante la suciedad, el polvo en suspensión, los ácaros y otros insectos. Para la limpieza de estas superficies recomendamos que empieces por descolgar cortinas, leer atentamente instrucciones de lavado y aprovechar estas mañanas de sol para lavar y tender y poder volver a instalarlas en la misma jornada. Recuerda que la cortina de ducha también es un elemento que suele pasar desapercibido y podemos incluirla en estas lavadoras “extra”. Encargarnos de mosquiteras y persianas requiere retirar primero el polvo para luego proceder a su limpieza con agua y algún jabón como el de lavavajillas. Si tus mosquiteras son correderas, una solución es enjuagarlas en la ducha para dejarlas impolutas y evitar encharcar las zonas de paso.

 

3- Alfombras, moquetas, tapices… revisa si requieren limpieza en seco o no y si decides conservarlos o retirarlos hasta que vuelva el frío según si esas zonas donde los sueles tener instalados requieren una limpieza y una puesta a punto o si los materiales concuerdan con las actuales temperaturas. Si sueles cambiar de alfombra de invierno y verano como por ejemplo de alfombra de lana u otros materiales que buscan dar confort y calor a otros con tejidos más livianos y transpirables aprovecha este momento. Es en estos elementos junto a almohadas, cojines, etc. donde más ácaros se acumulan y es paso previo para encargarte del rey del mambo: el dichoso polvo…

 

4- Aprovecha que ya tienes la casa despejada de los elementos anteriormente citados para encargarte a fondo del polvo. Alíate con tu aspiradora, pero antes, retira el polvo de estantes y zonas menos accesibles para que los restos que puedan caer al suelo sean recogidos por la aspiradora en esa pasada final. Conoce las posibilidades entre nuestra gama de gamuzas, cubremopas, ecotrapos, que seguro te garantizan un mejor resultado final.

 

5- Paredes y techos, ¡también se ensucian, sí! Porque no sólo de suelos hablamos cuando nos referimos a superficies, atentos a los rincones donde aparecen si nos descuidamos incluso telarañas. Alíate con nuestro cubre escoba para limpiar con sencillez y ayudándote de un palo telescópico para llegar donde hace meses no llegas.. Si además detectas algo de moho en paredes o azulejos utiliza un producto específico para poder combatirlo y mantener a raya esos microorganismos tan dañinos para nuestra salud.

 

6- Realiza tu cambio de armario personal, aprovecha para retirar todas las prendas que no utilizarás los próximos meses para guardarlas tras una buena lavada y no dejes de ocuparte también del polvo de baldas, estantes y cajones que suelen pasar meses abarrotados y acumulando polvo y desorden. Ocúpate también de edredones, mantas o sábanas para lavarlas al menos a 60 grados y descomponer alérgenos que campan a sus anchas. Guárdalas en cajas o bolsas cerradas herméticamente y dispón de materiales más adecuados como el algodón, el lino o el hilo para combatir estos meses de más calor.

 

7- Ocúpate de tus colchones, aprovecha este momento de total “desmantelamiento” para aspirarlos a conciencia y realiza un mantenimiento con algún spray anti ácaros. Cuando esté completamente aireado y seco puedes ocuparte y darle la vuelta como recomiendan los fabricantes y que casi siempre olvidamos hacer.

 

8- No dejes de revisar pantallas, lámparas, bombillas y tubos de luz en los que también se acumula polvo y suciedad y repasa estos elementos con paños en seco si se trata de elementos conectados a la luz o mopas y cepillos con los que desprender la suciedad que más se ha acumulado estos meses y ha podido quedar pegada con mayor intensidad por el calor que desprenden bombillas y elementos conectados a la luz.

 

9- La reina del baño. Haz acopio de todo aquello que puedas necesitar para limpiar, pero sobre todo para desinfectar esta zona de la casa: productos suaves con griferías y otros más fuertes para desinfectar a fondo como un producto específico para eliminar restos de óxido, guantes, un producto multiusos jabonoso o un limpiador casero, lejía u otros desinfectantes para el retrete y bayetas o trapos para limpiar los sanitarios. Ocúpate uno por uno de los elementos del baño como inodoro, lavabo, etc. y remata tu limpieza con una fregona adecuada a la superficie de cada estancia y un cubo de tamaño y volumen adecuado para ti.

 

10- ¡Vamos a la cocina! Es la estancia reina en muchos hogares por la cantidad de tiempo que pasamos en ella y la cantidad de elementos que requieren de nuestro cuidado. Mantenerla despejada en elementos como la encimera, libre de trastos, facilita un mejor mantenimiento y requiere de una menor limpieza. Al igual que con los armarios, hay zonas que requieren ser vaciadas de vez en cuando, como cajones donde se acumulan migas y suciedad, el armario de los tuppers donde no todo el mundo encuentra pareja o la nevera que acumula a veces, tesoros olvidados al fondo de la misma. De nuevo ten a mano productos desinfectantes e higienizantes, así como paños y bayetas, estropajos, nanas, fibra verde en buen estado para atacar con mimo esa suciedad que puede llegar a poner en peligro nuestra salud si no somos implacables con baterías y otros microorganismos. Un ejemplo es el estropajo, ya que la mezcla de suciedad y humedad hace que proliferen las bacterias y es por ello por lo que los microbiólogos recomiendan cambiarlo cada semana… ojo al dato…

 

Finalmente, si quieres conocer más sobre nuestras recomendaciones, no dejes de leer nuestro último post donde te contamos las últimas novedades presentadas en Ámsterdam. ¡Ah! Y no olvides seguirnos en nuestras redes sociales para enterarte de todas nuevas novedades, sorteos ¡y mucho más! Solo si buscas la limpieza más limpia ‘made in Spain’.